Los dos métodos de financiación más utilizados son la tarjeta de crédito y los préstamos personales. Cada uno cuenta con sus respectivas ventajas, lo que los hace más convenientes en diferentes circunstancias. Ambos cumplen con la función de dar dinero fácil al cliente que debe devolver en un plazo previamente establecido, y es necesario conocer las virtudes de ambos para tomar la mejor elección.
Los factores que más se toman en cuenta a la hora de elegir son el costo del crédito y la comodidad. ambos métodos cuentan con las dos características pero depende del usuario elegir cuál es a la que le va a dar mayor prioridad.
Lo que ofrecen los préstamos personales
En este caso el cliente solicita una cantidad determinada de dinero a una entidad financiera, y se establecen los intereses y un plazo para devolverlo. A partir del momento en el que se aprueba la solicitud, todos los meses el cliente debe pagar la cuota hasta devolver el capital prestado además de los intereses.
Los intereses aumentan porcentualmente a medida que lo hace la cantidad solicitada y el tiempo preestablecido. Es por ello que la cantidad a devolver será menor a medida que lo sean tanto el monto prestado como los meses.
Los costos son relativamente bajos en estas condiciones si solicita poco dinero, por lo que son convenientes cuando es necesario cubrir costos pequeños. Sin embargo, es posible mantener los costos del préstamo lo suficientemente asequibles si se utiliza un comparador de créditos.
Estos préstamos se solicitan a través de internet en pocos minutos para mayor comodidad. Son muy fáciles de obtener porque usualmente tiene pocos requisitos y no es necesario enviar ningún tipo de papeleo adicional. Son ventajosos para personas que no tienen historial crediticio.
Las ventajas de la tarjeta de crédito
Esta modalidad es lo que se llama una línea de crédito, es decir, una cantidad de dinero predeterminada por el banco o la entidad financiera de la que puede disponer el cliente en el plazo de un mes con el compromiso de devolverlo antes de la fecha de corte pautada.
Son el método de crédito más utilizado por su comodidad e inmediatez, aunque esto mismo se paga con altos intereses en caso de no poder devolver el dinero a tiempo. Además, el coste de mantenimiento de una tarjeta de crédito es bastante elevado si se quiere acceder a las mejores. Hay que utilizar la tarjeta con mayor cuidado que los préstamos.