Una empresa de comunicación debe ser dinámica y estar orientada al cliente. Porque una agencia de publicidad, por ejemplo, no existe ni tiene entidad sin sus clientes. Son los clientes quienes le conceden reputación, quienes comentan mediante el boca a boca su buen hacer, quienes les permiten disponer de un cada vez más extenso portfolio de trabajos, ya que el objetivo de cualquier agencia de publicidad es ocuparse de la gestión de marketing de otras empresas o eventos.
Pero antes de empezar a tener clientes hay que darse a conocer. Aun con una cartera de clientes básica, sólida y estable, no debemos estancarnos. Una agencia de publicidad, en definitiva, tiene que estar abierta a salir de su zona de confort y diseñar campañas de marketing que quizá no sean parte de su sello profesional elemental. Esa es la única manera de actuar, al menos si se tiene más ambición que sencillamente contentarse con una empresa pequeña, sin crecer hacia gran corporación y sin franquiciarse en otras ciudades.
Hay muchas maneras de obtener nuevos clientes. Una de ellas, bastante habitual entre las empresas del sector del marketing y la comunicación, es la de los eventos anuales, sobre todo los nacionales y los internacionales. Puede que, para cubrir los gastos de obtención del stand y de impresión de folletos publicitarios o creación de anuncios SEM, la empresa necesite invertir préstamos rápidos sin nómina de WannaCash.es. Pero merecerá la pena, ya que la visibilidad y el feedback que obtendrá a cambio será enorme y con toda seguridad su porcentaje de clientes aumentará antes de que acabe el año; y, por ende, también sus beneficios.
Otra opción es la de los eventos intraempresas. Por ejemplo, de vez en cuando una agencia de publicidad puede alquilar un salón de actos para proyectar un documental de creación propia en el que da consejos de creación de campañas de marketing digital o gestión de redes sociales. De ese modo, además, la agencia generará contenido propio, quizá solo a cambio de créditos sin intereses o inversiones muy pequeñas. Así, se hace un hueco en su sector y aumenta su influencia.