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Los trámites básicos de una boda civil


Si bien el matrimonio está imbuido de un romanticismo que nos gusta a todos, a efectos prácticos no debemos olvidar lo que es: un trámite legal que proporciona derechos inalienables a cada miembro de la pareja que busca construir una vida en común. Por ello, incluso las personas más racionales y menos motivadas por el amor romántico acaban claudicando y aceptando las ventajas positivas del matrimonio, que ni mucho menos ha de ser religioso ni pasar obligatoriamente por una iglesia. Dicho de otro modo, el matrimonio es ante todo un trámite y se puede solventar en el juzgado.

 

Es lo que conocemos como matrimonio civil, y es importante tener en cuenta todo el lío de papeles y obligaciones jurídicas que cada persona de la pareja tiene que tener en cuenta para llevar el casamiento a buen puerto. El primer paso es solicitar una cita en el Registro Civil y seleccionar un lugar. Como hemos dicho, el sitio cómodo y básico es el juzgado, pero puede ser en un lugar significativo siempre que se haga ante notario. Esto es útil si hemos ahorrado o solicitado créditos online de WannaCash.es para organizar un banquete por todo lo alto con amigos y familiares.

 

Por otro lado, es imprescindible tener en regla y a punto toda la documentación para el gran día, y es la siguiente: el DNI original y una fotocopia, el certificado de nacimiento, el certificado de empadronamiento, una declaración jurada de que los dos miembros están legalmente solteros y la instancia del Registro Civil. Tampoco podemos obviar un elemento humano de vital importancia: los testigos, cuya presencia será importante a la hora de tramitar el expediente.

 

La cosa no varía demasiado si tomamos la decisión de casarnos fuera del juzgado y ante notario. Eso sí, conviene recordar que el notario ha de pertenecer al mismo municipio en el que se celebra la boda. En cuanto a la documentación, es exactamente la que hemos mencionado, si bien en este caso también debemos preparar un expediente matrimonial. ¿El último paso? El más divertido: amortizar los préstamos online de la celebración y hacerla memorable.